Entrevistamos a Te Protejo, la única organización de América Latina que certifica productos como cruelty free.

Conversamos con Daniela Medina, Directora de Compliance de la ONG Te protejo, con quien recorrimos la trayectoria de la ONG, nos contó cómo es el proceso de acreditación, cómo impacta en la industria y en los consumidores, y un análisis de la situación en América Latina.

  1. ¿Cómo nació Te Protejo y cuál fue la motivación inicial detrás de la creación de la organización? 

Te Protejo nació en el 2012 como una respuesta ante la necesidad de habilitar una organización que velara por la vida de los animales de laboratorio y que, al mismo tiempo, ofreciera información confiable y accesible sobre el tema. 

En este contexto de desinformación, Te Protejo surgió inicialmente como una fan page en Facebook, con el objetivo de visibilizar esta problemática y empoderar a las personas a elegir cruelty free a través del acceso a datos verificables. 

De esta forma, a lo largo de los años, la organización fue consolidando su rol como referente en la entrega de información transparente sobre el testeo en animales, guiando a miles de personas en su transición hacia hábitos de consumo libres de crueldad. Gracias a este trabajo sostenido, Te Protejo no sólo se posicionó como una fuente confiable para quienes buscan productos comprometidos con el bienestar animal, sino que además se transformó en la única organización en América Latina que certifica productos cosméticos como cruelty free. 

  1. ¿Qué estrategias utilizan para promover legislaciones que prohíban el uso de animales en el testeo de cosméticos? ¿Han logrado avances significativos en algún país de la región?

En Te Protejo, contamos con nuestra área de Incidencia la cual está enfocada en generar y habilitar cambios a nivel legislativo, corporativo, regulatorio y gubernamental a favor de los animales, labor que se extiende a lo largo de Latinoamérica. 

Una de nuestras principales estrategias ha sido trabajar directamente con la industria cosmética para habilitar los cambios necesarios hacia una producción libre de crueldad. Creemos firmemente que la colaboración activa con el sector privado es esencial para acelerar la transición hacia modelos éticos. Por ello, desarrollamos alianzas y trabajamos codo a codo con empresas, cámaras y gremios, así como con organizaciones de la sociedad civil, para generar transformaciones concretas en la forma en que se formulan y comercializan los productos cosméticos y de esa forma habilitar cambios legislativos. 

Algunos de nuestros grandes hitos son haber trabajado en la campaña Be Cruelty Free, junto a la organización Humane World for Animals, con el lanzamiento de #SaveRalph. Campaña que logró millones de firmas y consiguió prohibir a nivel legislativo la experimentación cosmética en animales México el año 2021, en Chile el año 2023 y Brasil el año 2025. 

Actualmente, en conjunto con la organización ARBA Perú, buscamos replicar esta ley en Perú, a través de la campaña  También Sienten, que tiene como objetivo prohibir la experimentaciones en animales en cosmética en dicho país. 

  1. Sabemos que Te Protejo también certifica marcas que no testean en animales. ¿Podrías contarnos en qué consiste ese proceso de certificación y qué requisitos deben cumplir las empresas? 

El proceso de certificación cruelty free de Te Protejo contempla una serie de criterios clave que deben cumplirse para que una empresa pueda acceder a la certificación. 

Entre sus requisitos principales, la empresa debe estar formalmente registrada ante la entidad sanitaria correspondiente a su país de origen, y contar con un catálogo vigente de productos que puedan ser evaluados en el proceso, es decir, contengan ingredientes de grado cosmético o químico. 

Es importante señalar que representantes de ventas de una marca no pueden postularse a certificación.

Durante la evaluación, se analiza exhaustivamente toda la cadena de suministro de la marca, independiente de los países en los que comercialice o se produzcan los productos. Paralelamente, se revisa la normativa vigente en los países donde se fabrican y venden dichos productos, para asegurar el cumplimiento de estándares. 

Para garantizar que no exista testeo animal en ingredientes y productos, se exige la presentación de certificados que respalden la no realización de pruebas tanto en ingredientes como en los productos terminados y cualquier fórmula intermedia. En caso de que la autoridad sanitaria solicite algún tipo de prueba o test toxicológico, la empresa debe hacer envío de los resultados de ese test, indicando qué tipo de prueba se realizó y cómo se llevó a cabo.

Además, se implementa un Sistema de Monitoreo de Proveedores. Éste es un conjunto de procedimientos o herramientas que le permite a la marca mantener la información siempre actualizada. La información enviada con respecto a los productos terminados e ingredientes, debe ser monitoreada de forma periódica por la empresa.

Por último, se le solicita a la empresa el desarrollo de una política de no testeo animal alineada con los principios que promueve Te Protejo, y su disposición someterse a auditorías, los cual permite asegurar que seguirá cumpliendo con los criterios establecidos incluso después de haber obtenido la certificación. 

  1. ¿Cómo impacta la certificación cruelty-free en la industria cosmética? ¿Observan una mayor demanda por parte del público o compromiso por parte de las empresas? 

La certificación cruelty free ha tenido un impacto significativo en la industria cosmética, transformando tanto las prácticas empresariales como las decisiones de consumo de las personas. 

A lo largo de nuestro trabajo, hemos observado cómo ha ido en aumento la demanda de productos más sostenibles y éticos, lo que también se refleja en distintos estudios sobre la industria. Por ejemplo, en 2024, Te Protejo junto a Inside Research realizó una encuesta que evaluó la percepción de la industria cosmética en Chile y su perspectiva sobre el fin de las pruebas en animales para esta industria. Entre los resultados, se reveló que un 68% de los consumidores busca que su producto esté libre de pruebas en animales antes de tomar una decisión de compra.

Frente a esta tendencia, muchas empresas cosméticas han respondido adaptándose, eliminando las pruebas en animales en todas las etapas de desarrollo de sus productos, reformulando sus productos para cumplir con normativas internacionales  más exigentes, certificando sus productos como cruelty free, incluso reformando sus políticas internas para atender a un mercado más ético, sostenible y respetuoso. 

  1. En tu opinión, ¿cuáles son los principales obstáculos que todavía existen en América Latina para lograr una transición completa hacia métodos libres de animales en cosméticos? 

Pese a que existen avances importantes en esta materia, aún existen impedimentos para una industria cosmética libre de crueldad en América Latina. Por ejemplo, en países como Argentina todavía hay regulaciones que exigen pruebas de seguridad en productos cosméticos sin prohibir expresamente la experimentación animal, lo que deja una puerta abierta para que las empresas continúen aplicando o solicitando estos métodos si así lo deciden. 

En el caso de otros países fuera de la región, como China, aún exigen el testeo en animales para permitir el ingreso de algunos productos cosméticos a su país. Esto puede representar una barrera para las marcas que buscan mantener un compromiso ético global.

Por otra parte, otro de los desafíos importantes es la falta de conocimiento y/o capacitación sobre métodos alternativos dentro de los entornos regulatorios, académicos e industriales. Muchas veces se sigue recurriendo al testeo animal por costumbre, desconocimiento o temor a innovar. A esto se le suma la ausencia de legislaciones claras en países de la región que obligue a dejar atrás estas prácticas. 

El camino hacia una transición completa requiere de cambios tanto culturales como normativos, abriendo el conocimiento a una ciencia actualizada, confiable y eficaz. Por ello, es clave seguir concientizando, presionando desde la sociedad civil e impulsando políticas públicas que prioricen la seguridad humana y el respeto por los animales. 

  1. Por último, ¿qué mensaje le darías a quienes aún creen que el testeo en animales es necesario para garantizar la seguridad de los productos?

Los números son claros, los porcentajes de eficacia de las pruebas en animales son sorprendentemente muy bajos. Pretender predecir como reaccionará el cuerpo humano a partir de lo que sucede en la piel de una rata o un conejo no solo es científicamente limitante, sino también poco eficiente. Somos organismos completamente distintos, con respuestas biológicas que no siempre se correlacionan. Insistir en estos métodos no sólo atrasa el avance científico, sino que también perpetúa el sufrimiento innecesario en millones de animales.

Afortunadamente, la ciencia y la tecnología ya han dado pasos enormes en esta materia. Hoy existen alternativas modernas, precisas y éticas, como los ensayos in vitro y los análisis computacionales, que permiten simular con gran exactitud cómo reaccionan los tejidos humanos ante diferentes ingredientes. Estas herramientas no sólo reducen el margen de error, también ofrecen resultados más relevantes y directamente aplicables a la salud humana. 

En definitiva, elegir no testear animales no es sólo una decisión técnica: es un acto de compasión, de empatía y respeto por la vida de otros. Es reconocer que el sufrimiento de un ser vivo no debería ser el costo para comodidad o la belleza. Hoy tenemos las herramientas para hacer las cosas mejor y con cada avance, cada elección informada, podemos construir una industria más ética, más consciente y verdaderamente comprometida con el bienestar de todos los seres que habitan en el planeta.

Leave a Comment

Your email address will not be published. Required fields are marked *